Los nuevos centros de coworking aglutinan profesionales ‘freelance’ con gran talento entre los que potencian sinergias, les ofrecen oportunidades laborales y buscan una función social a sus proyectos. Así iniciaba David Guerrero este artículo que se remonta a un lejano 2013. En ese momento en Barcelona apenas había 50 espacios que afirmaran hacer coworking. Dos años más tarde y con ese número multiplicado por cuatro el Crec, donde trabajo como Community Builder, el Crec ha multiplicado por nueve sus miembros y se ha convertido en un espacio de referencia de la ciudad y especialmente en un nodo de creación y el hogar profesional de casi un centenar de profesionales del barrio de Poble Sec convirtiéndose . En este artículo se recogen algunos puntos de vista que teníamos en esos momentos, en los inicios del proyecto.
Más allá de un espacio compartido
Marc Navarro y Carles López lo tenían claro cuando hace menos de un año idearon Crec. “No queríamos un espacio de alquiler, el objetivo era facilitar las sinergias y crear comunidad“, explica Navarro. Lo han hecho en una nave totalmente reformada del Poble Sec de Barcelona en el que hay tres actores fundamentales: los ciudadanos, los emprendedores y ellos mismos. “El talento del coworker ya existe, hacemos que llegue al ciudadano a través de nosotros”, apunta López, atribuyendo a su equipo el papel de correa de transmisión entre los conocimientos de los profesionales instalados en Crec y los ciudadanos interesados en aprender cosas nuevas.
